¿Cómo piensas diferenciarte en tiempos de IA?
Unas pocas ideas sobre cómo destacar frente a todo el ruido que se genera con las aplicaciones de IA.
“Queríamos coches voladores y nos dieron 140 caracteres” la famosa frase de Peter Thiel nos va a perseguir durante mucho tiempo y debería hacernos caer en la cuenta de que la tecnología no llega tan rápido cómo nos gustaría, a veces por cuestiones de seguridad, regulatorias, o incluso por dificultades técnicas aún difíciles de resolver.
En mi caso esto lo he vivido recientemente en mi familia, hace unos 5 años, cuando en Tesla empezaban a emocionarse con lo de la conducción autónoma, le dije a mis hijos que no necesitarían sacarse el carnet de conducir. Ahora la mayor ya lo tiene y el mediano se lo va a sacar pronto.
Tendemos a sobreestimar el efecto de una tecnología en el corto plazo y a subestimarlo en el largo plazo.
Roy Amara
Con lo de la AGI estamos viviendo una situación similar, queríamos una IA siempre certera y nos dieron una que deja de usar los guiones largos.
Pero bueno, hoy no venía a hablar de futuro, que ya bastante tengo con lo que escribo cada semana en
, sino de presente, y en concreto de cómo diferenciarnos cuando todo Internet se está llenando de basura generada por IA.La historia no es nueva, y esta falta de originalidad es lo que muchas veces acaba pasando factura a largo plazo a las empresas que no son capaces de competir en el mercado y se acaban estancando.
Esto lo aprendí cuando me dedicaba a enseñar a usar los OKR, porque muchas veces su implantación en la empresa se lideraba desde el área de gestión del talento y ahí aprendí que había una técnica llamada Topgrading que buscaba encontrar los perfiles adecuados para un puesto a través de la diferenciación, evaluando competencias y valores, no solo habilidades técnicas.
En el Topgrading se explica que es un error que todas las ofertas de empleo sean iguales al enfocarse en las titulaciones y la experiencia, no tanto en las capacidades. Esto lo que lleva es a que todas las empresas acaban contratando los mismos perfiles, por lo tanto todas las empresas terminan siendo iguales y nadie es capaz de diferenciarse.
Lo mismo se puede extrapolar a los curriculum, las notas de prensa, los anuncios de adwords, los artículos para el SEO, las miniaturas de los vídeos de youtube, los difuntos hilos de twitter y los cansinos mensajes de linkedin de expertos en ventas B2B.
Lo siento, pero me niego a usar esas técnicas, quizás vaya más despacio o nunca logre llegar tan lejos como las que las usan, pero al menos mantengo mi integridad.
Y ahora sí, vamos al grano, porque lo que va a pasar con el contenido generado por IA es lo mismo elevado al cuadrado. Internet se va a llenar de tanta basurilla que va a costar más que nunca diferenciarse.
Lo de los guiones largos es la gota que colmó el vaso. Para que te hagas una idea, la semana pasada me llegó un prompt para enseñar a ChatGPT a que no parezca una máquina y al mismo tiempo una extensión de chrome para que no muestre en Linkedin cualquier contenido que lleve los guiones largos.
Entonces, ¿Cómo nos diferenciamos?
Que conste que no soy ningún experto en esto, pero bueno, al menos te cuento lo que yo estoy haciendo ahora que vuelvo a emprender:
Hazlo todo a mano. Escribir a mano se va a volver una moda, como ha pasado con la meditación o el croché. Pero más allá de eso, comienza por plasmar tus ideas sobre el papel, ya habrá momento de llevarlo a digital.
Usa solo la IA para idear, nunca para crear. Quizás es un poco extremo, pero creo que la gente le tendrá manía al contenido generado por IA, por lo que más vale que no le acaban teniendo manía también a tu marca.
Cambia de registro cada cierto tiempo. Lo que te funciona hoy no tiene por qué funcionar mañana. Tu trabajo ya no consiste en apalancarte sobre lo que te funciona hoy sino en descubrir qué funcionará mañana.
Deja los errores al desnudo. Aunque no se trata de escribir con faltas de ortografía, pero es posible que si escribes las cosas según te salen de la cabeza serán mucho más humanas que si le das 20 vueltas a la redacción.
Lee más que nunca, sobre todo a los clásicos. La IA no escribe como Cervantes. Ante tanta falta de originalidad y tanto Reguetón, la inspiración no la vas a encontrar en los gurús de linkedin sino en los que perduran en las bibliotecas.
El efecto Lindy va a tomar más fuerza que nunca. Tu gran reto en estos momentos no es descubrir qué va a ser un boom dentro de 5 meses sino apostar por lo qué va a seguir en pié dentro de 5 años.
No te fíes de nada ni de nadie. Es duro decirlo. Te lo propongo solo a modo de entrenamiento, así potenciarás a tope el sentido crítico. Además hace tiempo que a los políticos y periodistas les debíamos haber aplicado este criterio.
Comenta más que escribe. Parece que los dichosos algoritmos también están empezando a premiar esto. No se lo que durará esto, pero lo positivo es que puedes sintonizar con otras personas que están en la misma lucha.
Haz lo contrario. Ser un “contrarian” tienen muchas ventajas, por ejemplo para evitar las burbujas especulativas, pero en este caso además de servirá para diferenciarte de los expertos en copiar y pegar.
En un mundo donde todos tienen acceso a las mismas herramientas, la única ventaja real es la persona que se niega a comportarse como una configuración por defecto.
Greg Isenberg



Total Javier, yo no le veo el sentido a escribir con la IA por qué parecemos robóticos y además al final se converge y se pierden los matices que nos dan mismante nuestro propósito de marca personal diferencial.